Curiosamente, el déficit de magnesio en el organismo es mucho más común de lo que nos imaginamos.
Algunos de los síntomas debidos a una falta de magnesio en el organismo son fatiga, cansancio, estrés, debilidad, calambres musculares, o hasta insomnio… por lo que, si os sentís identificados, quizá deberíais continuar leyendo.
Conocido por muchos como el mineral “anti-estrés”, el magnesio es uno de los minerales realmente importantes para nuestro cuerpo porque es necesario para poder realizar correctamente múltiples funciones corporales: en el sistema muscular, en la asimilación del calcio, en el funcionamiento del cerebro, en la producción de energía y en muchos otros procesos vitales. Además, ayuda a controlar el azúcar en sangre, tiene un efecto relajante y hasta puede ayudar a perder peso.
Una dieta equilibrada nos aportaría la cantidad suficiente de magnesio, pero la realidad es que en muchas ocasiones nuestra alimentación diaria no nos llega a proporcionar ni un tercio de la cantidad recomendada, que es de 360 mg/día. Pero eso no es todo:
Las personas activas, estudiantes, mujeres embarazadas, deportistas o que realizan esfuerzos físicos fuera de lo normal, tienen un consumo más elevado de magnesio. También los fumadores y las personas sometidas a dietas especiales, como las de adelgazamiento. A todas ellas les puede ser beneficioso un suplemento de este mineral.
El magnesio se encuentra en cantidades importantes en los vegetales de hoja verde, dátiles, legumbres, soja, semillas, frutos secos, marisco, cacao y en menor cantidad, cereales integrales.
En el mercado se encuentran cada vez más se encuentran suplementos nutricionales con magnesio (mejor los de glicinato) solos o combinados con otros vitaminas (habitualmente del grupo B o C), minerales (potasio) o nutrientes (ácido hialurónico o colágeno por ejemplo).
¿Y vosotros? ¿Tomáis suficiente magnesio mediante la dieta diaria? ¿O tomáis alguna suplementación adicional? Estaré encantada de leer vuestros comentarios!!
Besos desde mi blog!!!