La espelta (igual que el Kamut, otro cereal que ahora está muy de actualidad), son variedades del trigo (por decirlo de una manera entendible) que se consumen desde tiempos ancestrales.

A partir de la espelta primitiva o escanda, (un cereal antiquísimo) se han ido desarrollando el resto de las variedades de trigos con sus consecuentes variaciones genéticas, por eso NO todos los trigos sientan bien al organismo. (Sí, es una variedad de trigo más natural y fácil de digerir, pero en definitivas cuentas, con gluten).
La harina de espelta se considera una alternativa a la más conocida harina de trigo. La espelta es un cereal que requiere de un proceso más complejo para su extracción, por este motivo toda la producción se pasó al trigo como el cereal más productivo.
Sin embargo, en los últimos años con el auge de la vida saludable, se descubrieron las grandiosas propiedades de la espelta. En este post hablaremos sobre esas propiedades y el gran abanico de recetas donde se puede incluir.
En el mercado, se puede encontrar en panes, galletas, repostería o hasta en harina que se puede utilizar de la misma manera que lo haríamos con la harina de trigo convencional (pero siendo la primera mucho más saludable y digerible para el organismo).
Las propiedades nutricionales más destacables de la espelta son:


