Desde el plano físico al mental, el yoga es sin dudarlo, una de las prácticas más beneficiosas para la salud. A pesar de ello, lamentablemente todavía en la mayoría de las clases occidentales del yoga tienen una mayor afluencia de mujeres (¿Será que somos más inteligentes?), pero los hombres más y más están comenzando a interesarse en conseguir un hueco en las sesiones sobre una esterilla.
Poco a poco (o más bien rápido por lo que veo en mi entorno) muchos hombres ya han dado el paso y se han dado cuenta de los numerosos beneficios que el yoga puede aportar física, mental y espiritualmente. ¿Mayor fuerza? ¿Prevención de lesiones? ¿Mejor rendimiento físico? ¿Mayor calma y enfoque? ¿Quién sabía que «estirar y respirar» podría hacer todo esto por ti?
Así que, si alguno de vosotros (chicos) ha estado pensando en comenzar o continuar con vuestra práctica de yoga, a continuación, os muestro siete razones por los que los hombres deberían practicar más Yoga:1 . El Yoga mejora el bienestar general.
El Yoga es una de las prácticas que se debe probar si se desea un cambio de estilo de vida sustancial. Es una excelente práctica para mejorar el bienestar general, ya que promueve la salud física y la resistencia mental.
Poco a poco, si se va practicando con constancia, se experimenta un cambio en los patrones de sueño, así como hasta en dieta natural (y no hablo solo de comer). La mejor parte es que no se debe seguir un plan de entrenamiento y/o recuperación pesado para sobresalir en el yoga. (Lo ideal es practicarlo a diario).
2 . El Yoga hace que el cuerpo sea flexible y fuerte.
La mayoría de los hombres dudan en hacer yoga porque no son «suficientemente flexibles». (No podéis imaginaros cuantas veces he escuchado este cuento). Pero este es un error común para todos los nuevos practicantes en yoga.
Uno de los principales beneficios físicos del yoga es el aumento y la mejora de la flexibilidad y la fuerza, por lo que estos dos principios no son prerrequisitos para una práctica de yoga. Es decir que no tienes que ser flexible y fuerte de antemano.
Siguiendo la misma lógica, tendríamos que pensar que ya tienes que ya estar flaco para comer sano. ¿no? Y no es así. Así que sí, el yoga ayudará a mejorar vuestro equilibrio y flexibilidad y, por supuesto, fortalecer vuestros músculos durante el proceso también.
3 .El Yoga ayuda a perder peso.
El oga es una práctica de mindfulness que se traduce fácilmente en la conciencia de comer, dormir y hábitos de vida. Es bueno para la salud intestinal, ya que ayuda a masajear los órganos internos, lo que da un impulso instantáneo en la tasa metabólica (casi como una sesión de pesas).
4 .El Yoga alivia el dolor y las lesiones.
¿El dolor corporal no desaparece? El Yoga te puede ayudar. En comparación con otras prácticas deportivas que podrían exponeros a actividades extenuantes y aumentar el riesgo de lesiones, el yoga sólo requiere la inspiración (aunque a menudo desafiante) a lo que se suma que ayuda a disminuir el riesgo de lesiones (si se practica correctamente, claro).
Los estiramientos en yoga pueden ayudar a aliviar suavemente el dolor que puede tener articulaciones y fascia. En la práctica diaria, también se realizan muchas posturas para estirar la espalda, uno de los lugares más comunes donde los hombres (y las mujeres) suelen experimentar dolor (crónico a veces).
5. Yoga como fuente de juventud
El Yoga os hará sentir vivos y llenos de vitalidad por dentro y por fuera, no importa cuál sea vuestra edad. De hecho, conozco a gente mayor (de setenta años) muy alentados y puestos en yoga porque los mantiene sanos y en forma.
6. El Yoga alivia el estrés.
¿Alguien todavía no conoce esta propiedad? El Yoga es una de las mejores maneras de impulsar naturalmente la salud y paz mental. Ideal para aclarar y calmar la mente, e incluso luchar contra la depresión leve. Las personas que sufren de ansiedad también se beneficiarán de sus efectos calmantes. Todo son beneficios.
7. El Yoga aumenta la salud de los huesos.
El yoga tiene muchas posturas que pueden aumentar la salud ósea. Estas posturas o asanas aumentan su rango de movimiento y movilidad general. Algunos estudios también muestran que el yoga puede reducir el riesgo de osteoporosis. (No solo en mujeres)
Sin embargo, es importante destacar que hay posturas que requieren una cierta práctica antes de poder hacerlas perfectamente. Los principiantes deben tomar precaución de los riesgos, y siempre pensar en la seguridad en primer lugar. (No debemos intentar hacer posturas imposibles si no tenemos todavía la capacidad para ello).
Tiempo, práctica, desempeño y perseverancia harán que consigáis vuestro objetivo al nivel de práctica y la flexibilidad que deseéis. Todo es proponérselo.
¿Y vosotros? ¿Os habéis planteado comenzar con el yoga? Estaré encantada de leer vuestros comentarios!