Limpieza de cutis: El tónico, un básico a veces olvidado…

No me cansaré de repetirlo. Una de las bases para el mantenimiento y belleza de la piel, consiste en su limpieza. Cuando hablo de limpieza no me refiero a pasar un poco de agua por la cara, ni tampoco a limpiarla en un pim-pam-pum. No. Una limpieza exprés siempre es agradecida y obligatoria (eso mejor que nada), pero el ritual de limpieza exige algo más.

Para cuidar y limpiar nuestra piel correctamente, debemos primero lavarla, después aplicar un tónico y finalmente serum,  crema hidratante, o el tratamiento que toque.

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Pero mira por donde, el segundo paso del ritual de la limpieza diaria, es decir la aplicación del tónico, nos lo saltamos muy a menudo, ya que no tenemos claro si aplicarlo conlleva un beneficio real para nosotras o sólo para los creadores de cosméticos.

Claudia di Paolo, Beauty Hunter, un referente en estética y cosmética, nos cuenta todos los secretos del tónico, una pieza clave en la salud de nuestro rostro, pero en realidad, siendo es uno de los productos a los que menos importancia le suelen dar las mujeres cuando realizan cualquier tipo de cuidado en su cutis. Un grave error que vamos a analizar en este post:

Existen diversos tipos de tónicos para dermis o pieles sensibles, grasas, mixtas, secas, fláccidas, etc.

Es primordial en la rutina de belleza femenina y debe de ser usado dos veces al día, entre la limpieza de cutis y la hidratación o tratamiento.

Antes de aplicar la crema o serum en la piel, se tiene que esperar que el tónico facial se seque por completo naturalmente al aire.

El tónico refresca, hidrata, cierra los poros, equilibra la piel, y la prepara para que pueda recibir el tratamiento posterior.

Normaliza la piel que ha sido sometida a una limpieza, restableciendo el pH del cutis, independientemente si se usó para ello espuma, gel o crema limpiadora.

Aumenta el riego sanguíneo en la zona en la que lo hemos aplicado, debido al efecto tonificador sobre nuestra piel.

Revitaliza y rejuvenece de los tejidos.

Gracias a su textura y aroma, el tónico es considerado un agua multisensorial que beneficia la piel y los sentidos.

Un dato importante a tener en cuenta:  el agua micelar que utiliza tanta gente, no sustituye el tónico.

Para los hombres es el producto perfecto para sustituir el after save, a veces tan dañino para la piel (los que llevan alcohol).

La aplicación del tónico es sencilla pero existen varias formas de usarlo:

  • Una es con un algodoncito embebido en la loción tonificante mediante suaves golpecitos sobre la piel o movimientos circulares suaves.
  • Otra manera es aplicándolo a modo de “bruma” sobre el rostro. En este caso el tónico tiene que venir en un envase con spray (o volcarlo en un dosificador en bruma).
  • Se puede esparcir el tónico por el rostro con las manos ejerciendo presión con las palmas sobre la piel, sin frotar, simplemente apoyándolas con suavidad para que el producto penetre.
  • Lo más profesional es poner una pequeña cantidad entre las manos, depositar sobre el rostro, bajar la cabeza y dar toques o pellizcos suaves, esto activará el riego sanguíneo y cuando a continuación apliquemos el tratamiento ( serum  o crema ) éste penetrará mejor.
  • beauty-truqui: Guardarlo en el frigorífico y aplicar igualmente con la cabeza hacia abajo, con toques y suaves pellizcos.

A la hora de elegir el tónico, es muy importante tener en cuenta de  no utilizar lociones o tónicos con alcohol, ya que éste anula la hidratación natural de la piel. Ni aún teniendo la piel grasa o con acné. No es la mejor solución para el problema. Por ello, es conveniente que antes de elegir el tónico que mejor vaya con vuestra piel, os dejéis asesorar por una profesional de la belleza como Claudia di Paolo.

¿Y vosotros? ¿Soléis cumplir con el ritual de limpieza dos veces al día? ¿Utilizáis algún tipo de tónico después de la loción limpiadora? ¿MIráis que entre los ingredientes no haya alcohol? Estaré encantada de leer vuestros comentarios!

Besos desde mi blog!!!