A pesar de que ya conocía el blog de Amaya Ascunce, (periodista y una de las blogueras más leídas del país), gracias a la recopilación con pelos y señales de los consejos que su madre le ha ido dando a lo largo de su vida, no pude resistirme a comprarme su libro basado en las historias de su blog: “Cómo no ser una drama mamá».
¿Creéis que las historias y consejos que las madres (o “drama mamás”) dan a sus hijos pueden marcarles a lo largo de su vida? Estas y otras muchas reflexiones se detallan a lo largo del libro. En mi caso, podría decir que yo también tengo una «drama mamá» (aunque ahora es mucho más “moderna y light en su versión “drama abuelita”), y después de preguntarle a mi hija, he descubierto que yo también soy una “drama mamá”. ¡Cielos!!. Qué horror. ¿no? (Bueno.. tampoco me preocupa tanto..)
“Cómo no ser una drama mamá» es un relato irónico, divertido e ingenioso que recoge todos los «buenos consejos» que repetían (y todavía repiten) muchas de nuestras madres ( yo misma me ya incluyo en el grupo) como: “Si no comes no vas a crecer”, “Te lo dije, nena, te lo dije”, «Tómate el zumo rápido que se le van las vitaminas», «Te voy a lavar la boca con jabón» o «Te crees que soy la dueña del Banco de España” (Creo que esta última es un clásico de todas las madres…jejeje)