El yoga es mucho más que un simple ejercicio o una técnica de relajación. El yoga es una filosofía y estilo de vida que comienza por el cuerpo y acaba en la mente. Pero no solo en una tabla o esterilla en el suelo: el verdadero YOGA es un camino al interior de uno mismo, que nos hace más conscientes de nuestros potenciales y recursos naturales, como también de nuestros miedos y resistencias. No se trata solo de lograr observar los procesos de la mente con objetividad y desapego, sino también de aprender a escuchar el propio cuerpo con respeto y sensibilidad.
Siguiendo con estas premisas y de acuerdo con los principios que rigen la práctica del yoga, acaba de publicarse un libro del cual me encantaría hacer una reseña ya que está elaborado con todo el cuidado, rigor y atención posibles. Me refiero a RECETAS YOGUIS de Editorial Lungwerg.
Recién salido de la imprenta, el interior de sus páginas alberga una recopilación de recetas equilibradas con sabores, colores y texturas que brindan una sensación de paz y armonía. Se trata de composiciones sanas, perfectas para cargas las pilas sin dañar el medio ambiente, en cuya creación desempeñan un papel muy importante la vitalidad y la belleza.
Las recetas del capítulo «Saludos al sol» sirven para despertar el cuerpo y comenzar el día con tranquilidad. Los platos del capítulo «Guerreros» son los más copiosos y aportan la misma energía que las posturas homónimas. No obstante, se pueden adaptar fácilmente según lo que apetezca cada día.
En el capítulo «Posturas sentadas» los platos son sencillos pero deliciosos y reflejan la necesidad de recargar y enriquecer nuestra vida interior. Con ellos nutrimos nuestro cuerpo sin sobrecargar el sistema digestivo. Los platos del capítulo «Savasana» nos recuerdan que es necesario tomarse con calma el camino hacia el nirvana: son una muestra de que la tranquilidad, la seguridad y la felicidad son inseparables.
Ahí van unos consejos incluidos en el libro daros una pincelada del plato YOGUI PERFECTO. Veamos: